
En el día de ayer cuando los funcionarios del Modulo 14, uno de los departamentos más conflictivos de la prisión por el perfil de internos que lo ocupan, realizaban la inspección de celdas se percataron que uno de los barrotes de una celda estaba serrado casi en su totalidad, por lo que se actuó con gran celeridad para aislar a los protagonistas de tal suceso. Se trataba de dos internos de nacionalidad argelina, cuya trayectoria nada tiene de ejemplar, que habían utilizado a modo de sierra elementos comunes que una vez manipulados les sirvieron para tal propósito.
